El cursillo de cristiandad son espacios de convivencias entre laicos comprometidos con la iglesia católica, con el fin de ejemplificar la palabra de Dios ante la comunidad cristiana.
Así lo hizo saber, Alfonso Omaña, cursillista de la parroquia San Juan Bautista del municipio Urachiche, quien agregó, que este tipo de apostolado perteneciente a las diferentes diócesis se dividen en dos grupos, “unos estamos comprometidos en matrimonio y otros están solteros”.
Asimismo explica que ambos mantienen diferentes tipos de experiencias, “dentro del matrimonio buscamos unificar a la familia y los solteros lo ayudan a descubrir su vocación de vida”, subrayó Omaña.
En este sentido aseguró que frecuentemente realizan sus reuniones en distintos lugares del país.
En este orden de idea anunció que durante el mes de noviembre se realizó un encuentro del Movimiento de Cursillista de Cristiandad, en Barinitas estado Barinas.
“Allí participaron hermanos comprometidos en matrimonio de los estados Aragua, Carabobo, Cojedes, Lara, Mérida, Miranda, Portuguesa y Yaracuy”.De este modo siguió explicando que “existe un grupo que coordina y planifica las diversas actividades denominadas Ultrella, que consisten en actividades como: retiros espirituales, reuniones, oraciones en familias, celebración de la palabra y la visita a los enfermos”.
Resaltó que “lo que se aprende dentro del cursillo se queda dentro del grupo, es una manera secreta y sagrada de mantener el testimonio religioso dentro del apostolado”.
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