En Marzo

Con la visita del obispo de la Diócesis

34 JÓVENES RECIBIERON EL SACRAMENTO DE CONFIRMACIÓN EN NUESTRA PARROQUIA

Nuestra parroquia se vistió de gala, y llenos de gran jubilo, recibimos en el municipio al obispo de la Diócesis, Mons. Nelsón Martines Ruth, quien vino a oficiar la celebración del sacramento de confirmación.

Y es que un total de 34 jóvenes que se prepararon durante un año, lapso en el que estudiaron y reflexionaron sobre los dones y frutos del Espíritu Santo, formación humana sobre la iglesia, función de los grupos de apostolados y temas de actualidad social, recibieron este 15 de marzo del año en curso el sacramento de la confirmación, Esta información la manifestó, Luís Enrique Facón, catequista encargado de la preparación de los mismos.

La celebración se inició con la Santa Eucaristía, presidida por el obispo, quien se mostró muy entusiasmado desde su entrada al templo, y durante su homilía destacó el significado y compromiso que implica el sacramento de la confirmación, a su vez felicitó al párroco Hildemar Yayes, a los catequistas, ministros del altar y demás grupos que hacen vida activa dentro de la parroquia, por el esmero, dedicación y servicio que cumplen dentro y fuera de la iglesia. 

Al concluir la Santa Misa, el obispo durante una agradable conversación envió el siguiente mensaje a los jóvenes que confirmaron su fe: “les reitero lo que les dije en la homilía, Dios nos llama a la santidad, no debemos tener miedo a la santidad, ¿que Dios es exigente? Si vale, pero Dios es Padre, Dios comprende nuestra debilidad, todos somos pecadores, todos, aquí no se salva nadie, ni Francisco, porque el Papa Francisco, peca y el mismo lo reconoce; pero Dios es Padre, Dios siempre nos tiende una mano, Dios siempre está dispuesto a acogernos, yo le digo a estos jóvenes, le digo a toda la comunidad de Urachiche: animo, Vamos pa' lante, no se me quiebren, no importa el problema por el que estemos pasando, porque Dios es Padre, y Dios tiene misericordia de todos y de cada uno de nosotros, Dios no nos abandona, Dios está detrás de nosotros, buscándonos, tratando de que volvamos otra vez a nuestro camino, ese es Dios, y nosotros debemos buscar a Dios con profunda confianza”.  

A su vez se aprovechó el momento para que monseñor diera su recomendación para vivir el tiempo de cuaresma, donde expresó: “les recomiendo que cada uno se plantee su vida, su vida cristiana, su bautismo; en estos cuarenta días antes de semana santa plantearse cada uno en la intimidad de su conciencia, yo soy un bautizado, yo soy un hijo de Dios, ¿cómo estoy viviendo mi bautismo? ¿en dónde tengo yo que corregir y enderezar el camino?, y eso lo debemos hacer todos, eso no es que tú, el otro y yo no, no, todos tenemos que sentarnos, profundizar, meditar nuestro bautismo, y corregir aquello que se tenga que corregir, ese es mi mensaje, sin miedo, porque a Dios no se le tiene miedo, a Dios se le ama, porque Él nos ama, tal cual somos, pecadores, Dios nos ama, nadie queda excluido del amor de Dios”.

También se le preguntó a monseñor sobre ¿cómo debemos combatir la miseria espiritual de la que habla el Papa Francisco? A lo que respondió: “tomando conciencia de que somos hijos de Dios, y convirtiéndonos hacia Dios, convertirnos, volver a tomar la senda del amor de Dios, de comprender lo grande que es el amor de Dios y que Dios nos ama a cada uno de nosotros con nombre y apellido”.    

En cuanto al recibimiento en la parroquia y sus apreciaciones sobre la misma monseñor manifestó: “a mí esto me encanta, ir a las parroquias, esto de estar con la gente, oírlos, pasar un ratico con ellos, estar con el sacerdote, desayunar o almorzar con él, oír sus preocupaciones, sus angustias, sus proyectos, eso da vida, a mí me da vida, porque uno pasa mucho tiempo entre cuatro paredes, en San Felipe, en las oficinas de la Curia con puro papeleo, puro trabajo burocrático que lo aleja a uno del pueblo, en cambio en esto, uno siente al pueblo, ve las angustias del pueblo, las felicidades, las alegrías del pueblo, y la verdad eso me da vida y me hace sentir bien.

Me voy muy contento porque en la parroquia hay un grupo de ministros del altar que visita los enfermos, visita los hospitales y eso es maravilloso, ojala que ese grupo vaya creciendo cada día más, ojala crezca cada día más el número de catequista, es importante que no exista sector de la parroquia donde no se encuentre siquiera un catequista, ojala de estos jóvenes que se confirmaron hoy, salgan muchos muchachos que deseen y quieran ser catequistas, que es una vocación admirable, me voy muy contento porque veo que la parroquia ha ido creciendo poco a poco y eso es bonito, eso es muy bueno”. Finalizó

Y no podía pasar por alto nuestro párroco Hildemar Yayes, quien envió a los confirmados las siguientes palabras: “ Quiera Dios y la gracia, en esos muchachos por el Espíritu Santo,  les ayude a permanecer fieles a Cristo como testigos, que recuerden que son testigos y darán testimonio de la fe que hoy han confirmado, pido a Dios y a la Virgen que ellos permanezcan fieles a su iglesia, que no suceda como en otros casos que hay muchachos que hacen la comunión y la confirmación como un compromiso social y luego se van”.